Las momias egipcias nunca dejan de sorprendernos. Un estudio realizado por egiptólogos polacos en el denominado Proyecto de las Momias de Varsovia, concluye que una momia conservada en el Museo Nacional de Varsovia, y que hasta ahora se creía que era la de un antiguo sacerdote, en realidad es la de una mujer embarazada que vivió en el siglo I a.C.
[the_ad id=»5012″]La verdadera identidad de la momia se detectó después de que los científicos notaron un pie diminuto en el abdomen luego de una exploración.
Según escribe Marzena Ożarek-Szilke en el artículo que anuncia el hallazgo: «Aquí se presenta el único ejemplo conocido de una mujer embarazada momificada y las primeras imágenes radiológicas de un feto así».
«Con mi esposo Stanisław, un arqueólogo de Egipto, pudimos ver las imágenes por última vez y notamos una imagen familiar de padres de tres niños en el abdomen de la mujer fallecida: un pie diminuto», dijo Ożarek-Szilke.
Los expertos que participan en el proyecto creen que los restos pertenecen probablemente a una mujer de alto estatus, de entre 20 y 30 años de edad, que falleció en el siglo 1 A.C.
Usando la circunferencia de la cabeza del feto, estiman que tenía entre 26 y 30 semanas de desarrollo cuando la madre murió por razones desconocidas.
«Este es nuestro hallazgo más importante y más significativo hasta ahora, una sorpresa total», dijo Wojciech Ejsmond, miembro del equipo de la Academia de Ciencias de Polonia, a Associated Press.
Dentro de la cavidad abdominal de la momia se encontraron cuatro paquetes que se cree que eran órganos envueltos y embalsamados, pero los científicos dicen que el feto no había sido extraído del útero.
Los científicos dijeron que no estaba claro por qué el feto no había sido extraído y embalsamado por separado, pero especulan que puede deberse a las creencias espirituales sobre la otra vida después de la muerte o a las dificultades físicas para remover el feto.
La momia misteriosa
¿Qué hacía una momia femenina en el ataúd de un sacerdote egipcio? Posiblemente todo se remonte al siglo XIX, cuando tal vez un traficante de antigüedades, puso la momia de la mujer en un sarcófago que no le correspondía, para hacerla pasar por un objeto más valioso.
[the_ad id=»5014″]Este hecho parece respaldado por el evidente daño que presentan algunos de los vendajes de la momia, posiblemente causado por saqueadores del siglo XIX que buscaban amuletos y objetos valiosos.
Por lo tanto, es imposible saber quién era esta mujer, o incluso si venía de Tebas, donde presuntamente se descubrió el ataúd.
Las inscripciones en el elaborado ataúd y el sarcófago habían llevado a los expertos del siglo XX a creer que la momia del interior era la de un sacerdote varón llamado Hor-Djehuti.