Mitos, leyendas, verdades, fabulas, la Edad Media está repleta de crónicas nórdicas en donde se menciona a un terrorífico monstruo marino, de tamaño inconmensurable que vivía entre Noruega e Islandia, que se tragaba hombres, ballenas e incluso barcos.
[the_ad id=»5012″]¿Qué es el Kraken?
El kraken es un enorme monstruo submarino que se encuentra en océanos y aguas profundas entre Noruega e Islandia. Su nombre se debe a su forma semejante a un pulpo o calamar.
¿Qué aspecto tenía el Kraken?
Según los relatos, el Kraken se asemeja a un pulpo gigante. Presenta numerosos tentáculos con grandes ventosas que pueden llegar a medir hasta dos metros de diametro y unos enormes ojos atemorizantes.
El origen de la leyenda del Kraken
Como toda leyenda tiene un origen difuso, pero la historia de este monstruo marino se origina para algunos en un relato escrito por el Rey de Noruega Sverre por el año 1180.
También se describió con gran precisión la fisonomía y los hábitos alimenticios del kraken en el texto didáctico noruego denominado Konungs skuggsjá o King’s mirror, escrito en 1250 por un autor anónimo.
Para la gran cantidad de marineros de la época, el mar era un lugar peligroso, inmensurable y plagado de temores, el cual ocultaba en sus profundidades miles de criaturas inimaginables. Es así que el avistamiento de un calamar gigante se convirtió fácilmente en una criatura mitológica para los navegantes.
Pero las historias sobre esta criatura gigante continuaron en el tiempo. En el siglo XVIII, se empezó a conocer con el nombre de kraken, término de origen noruego que hace referencia a algo retorcido.
En 1752, el obispo de Bergen, Erik Ludvigse Pontoppidan, habla del kraken en su Historia natural de Noruega de esta manera:
“Una bestia de una milla y media de longitud, si agarrara al buque de guerra más grande, lo arrastraría hasta el fondo”, además agrego “vive apostado en el fondo marino y sólo sube a la superficie cuando es calentado por el fuego del infierno”.
¿Existe el Kraken en la vida Real?
Como los avistamientos de estos monstruos marinos crecieron de manera considerable, muchos científicos se ocuparon del tema.
El célebre naturalista sueco Carl von Linneo, padre de la taxonomía moderna, incluyó en el año 1735 al Kraken en su Systema Naturae.
Para el año 1802 el francés Pierre Dénys de Montfort (1766-1820) un naturalista francés, en particular un malacólogo, recordado hoy por sus investigaciones pioneras sobre la existencia de los pulpos gigantes, hace mención de dos tipos de pulpos gigantes en Histoire Naturelle Générale et Particulière des Mollusques. Se trata de una descripción enciclopédica de fuentes muy diversas y valiosas.
Montfort se atrevió más tarde a afirmaciones más osadas. Propuso que diez buques de guerra británicos que habían desaparecido misteriosamente una noche de 1782 habían sido atacados y hundidos por pulpos gigantes.
Pero los británicos sabían perfectamente lo que había sucedido con los barcos aquella noche, lo que resultó en una revelación vergonzosa para Montfort. Su carrera nunca se recuperó y murió de hambre y pobre en París alrededor de 1820.
En defensa de Pierre Dénys de Montfort (al cual obviamente no me une ningún tipo de vínculo), debe tenerse en cuenta que muchas de sus fuentes para el “pulpo kraken” probablemente describen el verdadero calamar gigante, cuya existencia se demostró en 1861.
En 1861 se probó definitivamente la existencia del Kraken, cuando el vapor Alecton se encontró con uno de ellos en aguas de Tenerife. Su capitán intentó subir a bordo de la embarcación al enorme calamar, aunque no pudo, se quedó con un pedazo que hizo llegar a París con el relato de lo sucedido. Se le catalogó como Architeuthis o calamar gigante.
Ya en nuestros tiempos, un equipo científico japonés en 2006 logró filmarlo y también un canal norteamericano en 2012. Determinando que, los machos miden 10 metros y las hembras 14 metros. Tienen el ojo más grande del reino animal, que puede medir hasta 30 centímetros de diámetro y habitan en profundidades extremas alcanzando los 2.000 metros, en el océano Pacífico y Atlántico.
En 2020 el cadáver de un calamar gigante de cuatro metros de longitud fue arrastrado hasta la orilla de la Bahía de Britannia, en Sudáfrica. Un hallazgo más que sorprendente ya que se trata de una especie muy difícil de encontrar, y mucho menos en aguas poco profundas.
El Kraken en la mitología griega
EL kraken, también forma parte de la mitología griega siendo uno de los oponentes de Perseo en su cruzada por salvar a la bella princesa Andrómeda.
Perseo, héroe griego, fue quien enfrentó al Kraken utilizando como arma la cabeza de Medusa (a quien había decapitado recientemente) con el fin de salvar a la princesa Andrómeda.
Perseo cabalgando sobre Pegaso se encontraba sobre el cielo de Etiopía con rumbo a su encuentro con su rey Polidectes, a quien debía entregarle nada menos que la cabeza de Medusa como regalo de bodas.
En su viaje Perseo comenzó a oír desgarradores gritos de auxilio. No pudo darse cuenta de donde provenían ni quién los originaba.
Desconcertado, Perseo empezó a planear con Pegaso, dando vueltas sobre el sitio donde había oído esos gritos. Perseo alcanzó a ver en la lejanía a una mujer encadenada a unas rocas cerca del estruendoso mar, era la princesa Andrómeda, hija de Casiopeia y el rey de Etiopía.
Al encontrarse frente a ella, Perseo le preguntó por qué se hallaba atrapada y a qué le temía; a lo que ella le explica que había sido ofrecida como sacrificio para calmar la furia del dios Poseidón, quien se encontraba furioso con Casiopeia y había desatado una gran destrucción sobre el reino de Etiopía.
Lentamente, el Kraken empezó a emerger del océano fijando su mirada en la joven encadenada; y, sin pensarlo dos veces, Perseo alzó la cabeza de Medusa frente al Kraken convirtiéndolo parcialmente en piedra, para así acabarlo con un ataque de su espada directo al corazón.
Andrómeda, fascinada con la gran hazaña que Perseo acababa de lograr delante de sus ojos, saltó a sus brazos demostrándole lo agradecida que se encontraba, gesto que fue suficiente para que el héroe griego, se enamorara perdidamente de la princesa Andrómeda…
Reflexión Final
Pensar hoy en día en la existencia del Kraken es prácticamente imposible. Digamos que todos los contactos de marineros con estos monstruos marinos han quedado suscriptos a lo que actualmente damos en llamar calamares gigantes.
Pero bueno, quien soy yo para decir, que no existe…